Un regreso histórico en el Parque Nacional Lanín sorprendió a todos con la reaparición de un huemul en sus tierras luego de tres décadas de ausencia. Este hito en la conservación de la fauna andina fue posible gracias a un arduo trabajo de restauración ecológica llevado adelante por la Reserva Biológica Huilo Huilo y su Centro de Reproducción y Reintroducción del Huemul, y el equipo técnico y científico del Parque Nacional Lanín.
El huemul, un cérvido autóctono de la cordillera de los Andes, ha estado en peligro crítico de extinción, con poblaciones cada vez más fragmentadas. Su regreso a suelo argentino marca un antes y un después en los esfuerzos de conservación y reintroducción de especies en su hábitat natural.
Un corredor biológico clave
La Reserva Biológica Huilo Huilo, ubicada en la región de Los Ríos, Chile, y el Parque Nacional Lanín, en Argentina, conforman un corredor biológico esencial para la supervivencia del huemul. Desde la década de 1980, esta especie había desaparecido de la región, tanto en Los Ríos como en la provincia de Neuquén. Pero gracias al trabajo incansable de expertos en conservación, investigadores, guardaparques y brigadistas, el huemul ha vuelto a cruzar la frontera de manera natural.
El avistamiento de un ejemplar que atravesó desde Los Ríos hacia el Parque Lanín representa un logro sin precedentes. Se trata del resultado de 20 años de investigación, crianza en cautiverio y estrategias de reintroducción que permitieron la recuperación paulatina de esta especie en su hábitat original.
Un esfuerzo conjunto por la biodiversidad
El Proyecto Huemul ha sido la piedra angular de este proceso de reintroducción. Equipos multidisciplinarios han aplicado metodologías innovadoras y sostenibles, basadas en la ciencia y en el monitoreo constante de la especie. Esta iniciativa subraya la importancia del trabajo colaborativo entre instituciones públicas y privadas para la conservación de la biodiversidad.
El retorno del huemul al Parque Nacional Lanín no es solo un motivo de celebración para la comunidad científica y ambientalista, sino también una esperanza para la restauración de ecosistemas que han sufrido por la intervención humana y el cambio climático.
Recomendaciones para visitantes:
- Dado este acontecimiento, las autoridades han decidido mantener el área de Queñi cerrada al uso público hasta nuevo aviso, con el objetivo de garantizar la tranquilidad del hábitat del huemul. Además, se recuerda a los visitantes la importancia de no ingresar con mascotas a las áreas protegidas, ya que representan una amenaza para la fauna autóctona.
- Este regreso marca un nuevo capítulo en la historia del huemul y de la conservación en Sudamérica. Es un recordatorio del impacto positivo que la acción humana puede tener cuando se une en favor de la naturaleza.
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