Iguazú, hogar de las impresionantes Cataratas del Iguazú, te invita a sumergirte en la magia de su naturaleza. Este destino ofrece una experiencia única donde la grandeza de las cataratas se combina con la exhuberancia de la flora y fauna. Te dejamos una propuesta para un viaje de 5 días:
Día 1 – Cataratas del Iguazú
Déjate cautivar por la grandiosidad de las cataratas visitando el Parque Nacional Iguazú del lado Argentino. Puedes recorrer el Parque a pie, caminando por las pasarelas que balconean a los distintos saltos. O bien aprovechar el tren que te traslada dentro del parque a los puntos de mayor interés. El espectáculo mayor te espera en la pasarela que balconea a la Garganta del Diablo. ¡No te lo pierdas!
Día 2 – Paseos por la selva
Sumérgete en la naturaleza misionera con un paseo por la selva. Existen muchas opciones para hacer paseos de aventura o disfrutar la riqueza natural y cultural de la zona. Embárcate para pasear y relajarte en el Río Iguazú o contrata una cabalgata por la selva misionera. Visita el Biocentro, un centro de interpretación de la selva atlántica donde se pueden contemplar muchas especies de flora y fauna nativa. Y no te pierdas el Orquideario, un vivero especializado donde se cultivan más de 40 especies de orquídeas.
Día 3 – Cataratas del Iguazú, lado brasilero
Explora senderos y aventúrate en emocionantes excursiones del lado brasilero de las Cataratas. La vista de los saltos es completamente distinta que la del lado argentino. Además, puedes aprovechar y visitar el Parque de las Aves, que trabaja en la conservación de las aves de la Mata Atlántica.
Día 4 – Excursiones: ruinas jesuíticas y minas de Wanda
Dedica el día a conocer parte de la historia y cultura de la región. Existen 4 misiones jesuíticas que pueden visitarse en la zona, donde los padres jesuitas convivieron con los pueblos guaraníes: Loreto, Santa Ana, Santa María la Mayor y San Ignacio Miní. Cada una tiene sus particularidades y podés visitarlas en conjunto o individualmente. Te sugerimos no perderte San Ignacio Miní, un sitio guaraní jesuítico restaurado en su totalidad. Allí puedes apreciar la arquitectura, el urbanismo y el arte barroco-americano plasmado en los muros del templo, su gran fachada y la residencia de los Padres Jesuitas. Puedes visitar también las minas de Wanda y conocer sobre la historia de la minería en la región. Es un establecimiento histórico que aún está activo, donde se extraen piedras semipreciosas.
Día 5 – Regalos, cultura y una imperdible vista de la Triple Frontera
Disfruta la ciudad de Puerto Iguazú, tomándote el tiempo de recorrer la ciudad. Puedes visitar algunos de sus museos y aprender de la cultura guaraní, la historia regional y la producción de yerba mate. También hay excelentes opciones para deleitarte con la gastronomía regional: una buena caipirinha o productos a base de yerba mate son un must. Y para terminar, maravíllate mirando el atardecer en el Hito Tres Fronteras. Desde este punto se pueden observar los tres países limítrofes: Argentina, Brasil y Paraguay. Además, allí hay un corredor artesanal donde puedes comprar artesanías y souvenirs.
Emociones desbordantes, paisajes impresionantes y momentos inolvidables te esperan en Iguazú. Una experiencia que dejará una huella imborrable en tu memoria.